Frases célebres sobre economía dichas por políticos mexicanos - Terra México
30 de mayo de 2014 • 13:01 • actualizado a las 13:18
Frases memorables de políticos mexicanos sobre economía
¿Cómo se han expresado los políticos mexicanos respecto a la realidad económica del país?

"No traigo cash".Foto: Getty Images
http://youtu.be/bPRhJKHNJWo video relacionado.
Ríos de tinta han corrido intentando desentrañar quién gobierna a quién: la política a la economía o viceversa. A muchos políticos mexicanos parece no importarles dicha cuestión y hablan de temas económicos con despreocupación, acuñando algunas de las frases más tragicómicas de la historia nacional. El recuento de algunas de ellas:
Nadie aguanta un cañonazo de 50 mil pesos. Álvaro Obregón fue un militar y político que participó en la Revolución y fue Presidente de México de 1920 a 1924. Con esta frase célebre se refería a la corrupción que desde entonces era una práctica común a la política: por un soborno de 50 mil pesos, cualquier funcionario estaba dispuesto a hacerse de la vista gorda. Durante los combates en Santa Ana del Conde, Obregón perdió el brazo derecho y este hecho lo llevó a hacer ingeniosos señalamientos sobre la naturaleza de la economía mexicana, acuñando otro par de frases célebres al respecto. Contaba que para encontrar el brazo tuvieron que echar una moneda de oro al aire, de modo que la codicia impulsara al brazo a abalanzarse sobre ella; también decía que como en México todos eran ladrones, él era querido por el pueblo porque únicamente podía robar con una sola mano.
No traigo cash. Esa fue la respuesta que el ex Presidente Ernesto Zedillo dio, mostrando el forro vacío del bolsillo derecho de su pantalón a una artesana indígena que intentaba venderle una servilleta de manta bordada.
Un político pobre es un pobre político. Frase acuñada por Carlos Hank González, uno de los priistas más prominentes, líder del llamado Grupo Atlacomulco. Intervino en la designación de presidentes municipales, diputados, senadores, e incluso en el triunfo de varios presidentes de la República. Siempre se ufanó de haber nacido pobre y haber sido maestro rural, pero en 2001, año de su fallecimiento, la revista Forbes reportó que su fortuna ascendía a mil 300 millones de dólares.
publicidad
¡Defenderé el peso como un perro! Esta frase inmortalizó a José López Portillo, presidente de México de 1976 a 1982. López Portillo tomó decisiones arbitrarias y financieramente inadecuadas, que detonaron una de las crisis más severas en la historia de México. Desesperado ante la inminente crisis, el 1 de septiembre de 1982 el presidente José López Portillo en su sexto informe de gobierno expide 2 decretos: uno que nacionaliza los bancos privados del país y otro que establece el control generalizado de cambios. De nada sirvió ese entusiasmo, pues a las pocas semanas se retiró el Banco de México del mercado de cambios, el gobierno se vio forzado a declararse en moratoria de pagos y tuvo que devaluar de 22 a 70 pesos por dólar, además de pedir ayuda al Banco Mundial y al mercado norteamericano. La frase célebre completa puedes verla en el minuto 4:00-4:20 del siguiente video:
"¡Defendamos nuestro peso! Afirmemos y reafirmemos el derecho a tomar nuestras decisiones en materia monetaria; con los aranceles, con las licencias y con los estímulos y fomento a la exportación. Ésa es la estructura que conviene al país, ¡ésa es la estructura a la que me he comprometido a defender como perro!"
La pobreza en México es un mito genial. Así se expresaba Pedro Aspe, el Secretario de Hacienda del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, meses antes de que el país entrara en la peor crisis de su historia, devaluando el peso en 173%. La percepción que generó esta del sexenio salinista, se tradujo en una estrategia meramente política o incluso cosmética. El Estado Mexicano justificó esta medida como una estrategia de tipo administrativa. La paridad del dólar con el peso se convirtió de 1 dólar = 3417.8 pesos (aproximadamente) a 1 dólar = 3.41 pesos. La capacidad económica de los mexicanos vivió una etapa de espejismo financiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario